Nació en la ciudad de Manchester en 1984 y comenzó a brillar en el fútbol en la temporada 2002-03. Rápido, ágil y certero, pero con unas decisiones que terminaron por marcar su carrera en el deporte rey. Le tocó cruzarse con otro de los futbolistas con episodios algo oscuros en el fútbol, es decir, Joey Barton.
Él mismo, ya en 2004, fue el que originó el declive de Jamie Tandy al apagar un cigarro en su ojo en una fiesta de Navidad, Desde ese momento, el prometedor jugador del Manchester City provocó una oleada de problemas con la justicia y el alcohol que acabó por salpicar a todos los aspectos de su vida.
Jamie se marchó del City tras haber sido acusado de agredir a su novia Lisa Stewart. Su abogado explicó que "Tandy entró en una espiral descendente desde el suceso con Barton".
Además, sus problemas con la bebida le llevaron a comenzar una rehabilitación en 2008, pero sus necesidades le devolvieron al alcohol un año más tarde. Para acabar con esta situación, Tandy decidió suicidarse hasta en dos ocasiones. En una de ellas, el ex futbolista del Manchester City intentó estrellar su Peugeot 207, pero no logró quitarse la vida. Varios años más tarde, Jamie se dedicó a la limpieza para ganarse un dinero.