El Real Madrid sigue empeñado en demostrar que lo del Cádiz y el Shakhtar solo fue una desconexión puntual. Ante la SD Huesca, los blancos tardaron en entrar en calor, quizás aclimatándose a este horario poco reservado a los grandes, pero terminaron arrollando a un equipo oscense que demostró por qué ha empezado la temporada tan abajo.
La victoria, que se edificó en el final de la primera parte y se finiquitó nada más volver del descanso, permitió que Zidane y los suyos comenzaran a pensar en el Inter, ante el que los 'merengues' se juegan su futuro en la Champions esta semana.
Todo cambió desde el latigazo de Eden Hazard que supuso el 1-0 cuando Real Madrid y SD Huesca ya miraban al descanso. Antes, los de Míchel llegaron a poner en dificultades al Real Madrid con la misma receta de los últimos dos equipos que habían visitado el Alfredo di Stéfano: defensa y contragolpe.
A pesar de que mejoró al lado de Ramos, Rafa Mir volvió a demostrar que a Militao aún le falta para poder ser titular en el Real Madrid. Hasta en tres ocasiones se plantó delante de Courtois el delantero con su velocidad. Solo una valía y precisamente no fue en la única en la que el ariete azulgrana marcó.
Enfrente, solo Ramos y Karim Benzema, a cuentagotas, creaban peligro. El juego del Real Madrid fue espeso en la primera parte y el de Camas fue el único que hizo sudar a Andrés Fernández para salvar un cabezazo.
Hazard decanta el choque
Después de una gran acción de Ontiveros que no remachó Sergio Gómez en plena siesta de Marcelo, el equipo blanco se adelantó. El tanto, por cómo y cuándo se produjo, fue letal para la SD Huesca. Recibió Hazard y se sacó de la chistera un golpeo exquisito desde muy lejos para lograr su primer gran gol como 'merengue'.
Todo parecía bajo control hasta entonces por los de Míchel, que se vinieron abajo con el tanto. El Real Madrid creció y en la última acción de la primera parte dejó el choque sentenciado. Maffeo midió mal y Benzema no perdonó tras un buen centro de Lucas.
Ya no hubo partido hasta el final. Mosquera, impecable en el primer acto, se fue desenchufando a medida que pasaban los minutos. Los blancos volvieron como una apisonadora de las duchas y Valverde sentenció enseguida con el 3-0.
A Zidane ya no le importó mirar descaradamente al choque ante el Inter. Entró primero Mendy por Lucas, convertido en titularísimo en el lateral derecho, y luego el galo apostó por un triple cambio que, como siempre que el francés lo hace, acaba beneficiando al rival.
David Ferreiro puso el 3-1 al final, cuando Rodrygo, Benzema e Isco, que volvió a tener minutos tras la bula de 'Zizou', habían perdonado la goleada. El gol fue el justo premio al buen partido de Rafa Mir, asistente del gallego y fundido tras sus carreras de la primera parte.
Durante unos momentos, los altoaragoneses amenazaron con entrar en el partido, pero quien volvió a aparecer para poner las cosas claras fue Benzema, que cabeceó a la red una acción clavada a la de su tanto en Alemania ante el 'Gladbach, con Rodrygo en vez de Caseimro como asistente.
Los blancos se sitúan como líderes a la espera de lo que haga la Real Sociedad ante el Celta, en tanto que la SD Huesca sigue en problemas y en descenso.