Ninguno de los trabajadores del club rojinegro ha reconocido conocer este escrito, por lo que todavía no se sabe quién sacó a la luz el comunicado.
"Hacemos una llamada de emergencia a las empresas de la zona, nacionales y extranjeras. Somos un club con más de 110 años de historia. Tenemos la posibilidad de competir en Segunda B y nuestro filial en Tercera. Nuestro deseo es que el club pueda competir y no desaparezca. Los aficionados del Reus no se lo merecen", decía el texto.
Y todo esto podría tener su raíz inicial en la desaparición de Onolfo, inversor que llegó en invierno y que llevaría "más de 90 días sin aparecer por el club".
"A fecha de este viernes, este inversor solo se ha hecho cargo del 9,6% de los salarios de los jugadores y los empleados del Reus", confirmaba el llamamiento.
7 de junio de 2019