El conjunto de Baviera ahondó su grave crisis a nivel nacional con su derrota este fin de semana por 3-2 en su visita al campo del Borussia Dortmund, líder de la Bundesliga.
El Bayern no solo perdió tres puntos en su visita al Signal Iduna Park, sino que la derrota ha dejado a la vista de todos sus problemas internos.
En la prensa alemana se viene hablando desde hace semanas de conflictos entre varios miembros de la plantilla, de filtraciones desde el vestuario y, sobre todo, de una presunta 'cama' al nuevo técnico.
Y es que parece que varios pesos pesados del cuadro bávaro no se llevan nada bien con Kovac. Los medios locales señalan en este aspecto a Robben, Müller y Neuer.
"No hay solo un 'topo' en este club que brinda informacion, hay un par que son jugadores insatisfechos, ellos estan dando informacion para minar el trabajo de Kovac y despedirlo", afirmó el periodista Christian Falk.
Para añadir más gasolina al fuego, otra vaca sagrada del equipo protagonizó este fin de semana un incidente lamentable con la prensa.
Según 'Bild', Ribéry abofeteó a un periodista de 'BeIN Sports' tras el duelo de Dortmund, un hecho que posteriormente confirmó el director deportivo Hasan Salihamidzic.
"Franck nos habló de un altercado con su compatriota, Patrick Guillou, a quien conoce desde hace muchos años. Estuvimos de acuerdo con Patrick Guillou en que hablaríamos en una reunión acerca de cómo abordar este tema", comentó.
Todo un cóctel de escándalos y altercados que no hacen más que complicar una situación que comienza a ser muy delicada.
La única buena noticia para el cuadro muniqués es que aún queda mucho tiempo para poder reconducir la situación, pero para ello es necesario que se empiecen a solucionar desde ya todos estos problemas antes de que se conviertan en un quiste que conduzca al fracaso.