Southampton y Tottenham se citaron en el St. Mary's Stadium, en un atractivo encuentro que dejó la jornada de 'Boxing Day'. Ambos equipos, con objetivos bien diferentes, salieron al campo exponiendo sus mejores bazas y buscando llevarse los tres puntos.
Las primeras ocasiones llegaron en botas de jugadores locales. Adam Armstrong y Yan Valery la tuvieron antes de que llegara el minuto 10, pero ambos remates terminaron marchándose fuera.
El equipo de Conte no se sentía cómodo sobre el terreno de juego y eso se pudo ver minutos más tarde, cuando Ward-Prowse culminó el buen inicio de los suyos con un derechazo desde el costado izquierdo que terminó entrando en la portería de Hugo Lloris.
Este tanto espoleó tímidamente al cuadro londinense, que comenzó a buscar la meta rival con algo más de vehemencia. Cuando el descanso ya se vislumbraba, llegó la jugada clave del encuentro: penalti a favor de Salisu sobre Son que suponía además la segunda amarilla para el central.
La responsabilidad la asumió Harry Kane, al que no le tembló el pulso y mandó el esférico al fondo de las mallas. Ante este panorama, la segunda mitad apuntaba a ser un monólogo visitante en busca de la remontada.
Y así fue. Los 'spurs' terminaron por volcarse definitivamente sobre la meta de Forster para lograr el 1-2. Son y Kane siguieron siendo un peligro constate. A esto, hay que sumar las entradas al campo de Lucas Moura y Bryan Gil, que generaron peligro por las bandas. Sin embargo, los pupilos de Ralph Hasenhüttl supieron resistir cual gato panza arriba para lograr un valioso empate que les hace mantener, de momento, la distancia de diez puntos respecto al descenso.