El conjunto londinense reaccionó de manera tremenda y empató la contienda en poco más de un minuto ante un Barcelona plagado de canteranos.
Primero anotó el coreano Son, que aprovechó un balón muerto en el áera tras un rechace de Cuenca para, con un disparo raso junto al palo, recortar distancias.
Sin tiempo casi para respirar, el Tottenham aprovechó otro balón muerto en el área y ,tras mucho lío e indecisión, N'Koudou se tiró con todo para anotar en un rechace el 2-2.
29 de julio de 2018