El Tottenham no pasó del empate a cero ante el Bournemouth en un soporífero partido que hace que las esperanzas de los 'spurs' por estar en Europa se empiecen a desvanecer.
Los de José Mourinho no estarán contentos con la actuación arbitral, después de que en el minuto 4 pidiesen un discutible penalti sobre Harry Kane. El delantero inglés se llevó un claro empujón dentro del área en un córner que ni el colegiado ni el VAR vieron.
A partir de ahí, la nada. El Bournemouth, prácticamente desahuciado, se dedicó a defenderse y el Tottenham llegaba y conseguía saques de esquina, pero era incapaz de perforar la meta de los 'cherries'.
Pese a contar arriba con Kane, Heung-min Son, Lucas Moura y Erik Lamela, el Tottenham apenas creó peligro y se marchó del Vitality Stadium con un empate que empantana sus posibilidades de estar en Europa la próxima temporada.
Pudo ser peor para los de Mourinho, pero el VAR acudió a su rescate para anular un tanto de chilena a Callum Wilson, por mano en un rebote de Joshua King en los últimos instantes de partido.
La Liga de Campeones es ya una utopía, con los londinenses a diez puntos del Leicester, cuarto de la tabla, con cuatro jornadas por jugarse, por lo que les queda centrarse en la Europa League. Los de Mou están a tres puntos del Wolverhampton Wanderers, que marcha sexto.
El Bournemouth aún tiene esperanzas de salvarse y es decimoctavo, con un punto de ventaja respecto al Aston Villa y tres por debajo del Watford.