Dani Olmo tiró de picardía en el primer partido oficial de la temporada, la Supercopa de Alemania. El jugador español hizo caer a Lucas Hernández en una trampa nunca vista en un campo de fútbol.
El internacional de 'la Roja' posó el balón justo en la línea de banda, pero sin sobrepasarla, por lo que el partido seguía en juego, si bien Lucas Hernández no lo supo apreciar.
El futbolista del Bayern de Múnich vio el balón en la cal y lo recogió con las manos, como si fuese a sacar de banda. Rápidamente, el linier levantó la bandera.
Mientras Kimmich se encaraba con los futbolistas del RB Leipzig, el colegiado del encuentro le explicaba a Lucas Hernández que el balón no había salido y, por tanto, el cuero pertenecía al cuadro de la bebida energética.