El último día de clase antes de las vacaciones... y los cambios de colegio

La fuga de cerebros del Ajax puede comenzar con ellos. Tras una campaña sencillamente espectacular, los chicos se van de vacaciones. Unos niños rebeldes que han puesto en jaque a las grandes estrellas del fútbol europeo y que finalmente se quedaron sin su recompensa -la final de Champions- tras pasar con nota los exámenes.

Como si en el recreo les quitaran el bocadillo. En medio del patio, llegó un chico llamado Lucas Moura, el odiado por todo un colegio, el Johan Cruyff Arena, y rompió en mil pedazos los deberes que tanto trabajo les habían costado hacer.

Pero, al fin y al cabo, siguen siendo niños. Tras unos días de dolor, siempre vuelven a sonreír. El Ajax ya ganó la Copa y, salvo sorpresa mayúscula, levantarán también el título de la Eredivise este mismo miércoles.

El conjunto de Ámsterdam (83) aventaja en tres puntos a su inmediato perseguidor, el PSV (80). Con sumar un punto le valdría para no tener que mirar qué hace su rival en esta última jornada, pero, aún perdiendo, los de Eindhoven tendrían que recuperar en un partido los 14 tantos de diferencia en el global que tiene el Ajax sobre ellos.

Una auténtica utopía. El encuentro de los de Erik Ten Hag frente al De Graafschap parece más un trámite que otra cosa, pero estará cargado de un significado que va más allá de lo meramente deportivo, ya que uno -seguro-, o incluso dos futbolistas del cuadro neerlandés pueden estar ante su último partido en el club.

Frenkie de Jong jugará la próxima temporada vestido de azulgrana. El centrocampista ya firmó por el Barça hace algunos meses y pudo despedirse de su afición hace unos días en el último partido del Ajax en el Johan Cruyff Arena.

Pero otra película distinta es la de Matthijs de Ligt. Al joven central holandés le sobran novias y, pese a que todavía no ha dicho si seguirá o no, en Holanda ya casi han aceptado que también podría salir este verano. Los 'culés' también andan detrás de él.

De una forma u otra, el Ajax y estos dos protagonistas encaran el último día de colegio, ese en el que te despides de tus compañeros que no verás en varios meses, aunque puede que en este caso sea mucho más tiempo.