Llegó cuando más la necesitó. El Manchester United ansiaba conseguir una victoria de manera holgada delante de sus aficionados y llegó cuando el equipo más la requería.
Después de las dolorosas derrotas ante el Arsenal en la Premier League y ante el Manchester City en la Capital One Cup, y del empate ante los Wolves en la FA Cup, los 'red devils' despejaron las dudas con una satisfactoria goleada.
La víctima fue un Norwich City que parece que ha tirado la toalla. Último en la clasificación general, suma nueve partidos seguidos sin vencer y se encuentra ya a siete puntos de la permanencia.
El protagonista de la fiesta de Old Trafford fue Marcus Rashford. En su partido número 200 con el United, allanó el camino del triunfo con un doblete. En el primer tiempo, aprovechó una gran asistencia de Mata para abrir la lata y, ya en el 50', anotó el 2-0 desde los once metros.
Con los de Daniel Farke entregados, Anthony Martial sentenció el encuentro con otro pase de gol de Mata y, a 15 minutos de la conclusión, Mason Greenwood se unió al festival de goles con un zapatazo desde la frontal del área.
Con el desempate ante los Wolves en mente, Gunnar Solskjaer dio descanso a los más habituales y disfrutó del tramo final del encuentro sentado en el banquillo. Con esta victoria, los 'red devils' se colocan en puestos de acceso a la Europa League.