No se puede decir que todo haya cambiado porque los cambios radicales necesitan perdurar en el tiempo, pero el United ya suma más cinco meses sin perder, pandemia por medio, entre todas las competiciones.
En Old Trafford volvió a machacar y lo hizo frente a un Bournemouth que acabó en la lano sin saber por donde le venían todos los golpes. Son cuatro victorias y un empate desde la reanudación del fútbol inglés y los 'diablos rojos' ya se han colocado en puestos de Champions League a falta de lo que haga el Chelsea.
Stanislas despertó al gigante dejando humillado a Maguire con un caño y un zapatazo casi sin ángulo que no pudo atrapar De Gea. Greenwood, la joven estrella, firmó un doblete enrtre la primera y la segunda mitad y ya suma ocho anotaciones en lo que va de temporada. Fue una tarde de lo más alegre en Old Trafford.
A la fiesta se unió Rashford, aunque con una pizca de polémica. Jefferson Lerma entró con los tacos arriba a Martial y pudo haber roja, pero el árbitro no lo consideró como tal. Al minuto, una mano de Smith, que fue dudosa, acabó con el tanto de Rashford desde el punto de penalti.
El tercero del United fue un increíble disparo de Martial que acabó en la escuadra de Ramsdale y que fácilmente podría entrar entre los mejores de la temporada en la Premier. King intentó meter miedo desde los once metros, pero no fue suficiente.
Bruno Fernandes cerró la goleada con un tanto de libre directo en un sábado redondo para un United que hizo disfrutar de nuevo a toda su afición, a la que le encantaría poder estar disfrutando del gran estado de su equipo haciendo de Old Trafford una olla a presión.