Por lo general, el VAR ha calado bien en el aficionado medio. Con sus aciertos y fallos, el sistema solo recibe críticas, generalmente, por la lentitud con la que se toman algunas decisiones.
Pero la FIFA está trabajando con 'Hawk-Eye' para una nueva versión en la que el margen de error sea menor y que sea casi automática.
Según apuntó Antonio Gatto, director de Hawk-Eye en España, en 'AS', la idea es que haya una detección automática del fuera de juego: "Tenemos el mejor sistema de fuera de juego del mundo en cuanto a precisión y rapidez. En los últimos meses, nuestros ingenieros han trabajado mucho en la última joya de la casa, desarrollando una tecnología de fuera de juego automático que se basa en el rastreo de los jugadores en el campo y es capaz de poner la línea con una precisión excepcional en unos segundos".
El medio aseguró que todo está avanzado y esta tecnología podría utilizarse en el próximo Mundial: "La FIFA está muy contenta del resultado. No haría falta que hubiese un operador en el VAR".
Del mismo modo, de cara a mejorar la experiencia en las competiciones menos populares, 'Hawk-Eye' también está diseñando una herramienta que no precisa de operadores.
"Es una solución para competiciones más pequeñas, que no pueden aguantar el coste de un sistema como el que tiene LaLiga. Podría ser para la Liga Bielorrusa o para la Segunda B o la Liga Femenina. Competiciones más pequeñas y que disponen de menos cámaras. La instalación se tarda apenas dos horas y soporta hasta diez cámaras", concluyó Gatto.