Una seña que el Barcelona no se atrevió a hacer la pasada campaña, cuando jugaron contra el Real Madrid justo después de que el equipo madridista ganase a Gremio la final del Mundial de Clubes.
Una decisión polémica que envolvió a los dos clubes más laureados del fútbol español y que provocó distanciamiento entre ambos equipos, así como críticas por parte de una y otra parte.
Era una decisión conocida y no por ello dejó de ser controvertida en Vila-Real. En el Estadio de la Cerámica se escucharon algunos pitos cuando se pronunció por megafonía y cuando salió el Real Madrid al césped.
3 de enero de 2019