Arrancó con mucho ímpetu el Hannover, haciendo valer el factor campo para intimidar a un Werder Bremen sobrepasado por el brío inicial de su contrincante en todos los cruces.
Cumplido el primer cuarto de hora, Harnik abrió el marcador y espoleó a una hinchada ávida de triunfo ante un rival directo en la zona baja de la tabla de la Bundesliga.
Antes del descanso, Klaus puso tierra de por medio, firmando un 2-0 que sólo pudo maquillar Belfodil en el minuto 74, dejando el Werder Bremen escapar tres puntos que le hubieran permitido escalar posiciones.