Victoria importante para el Leicester, que evitó su entrada en barrena con un triunfo a lo grande: un sólido 4-1 para recuperar su pulso y regodearse en el King Power Stadium.
Arrancó decidido el equipo de Brendan Rodgers, que venía de caer ante Burnley y Southampton. Apretaba con Pereira y Ayoze, pero quien encontró el gol fue Harvey Barnes. Se adelantaban así los 'foxes', que apuntillarían al West Ham sobre el descanso.
Ricardo Pereira fue el encargado de batir a Randolph, aunque a la vuelta llegaría el 2-1. Ndidi cometió penalti sobre Haller y Noble recortó distancias, pero esto no coartó al Leicester, que acabó martilleando con Ayoze Pérez.
Con el partido igualado, Ogbonna derribó a Iheanacho y esto mató al West Ham. El delantero canario no falló el penalti y en el 88' completó la goleada para la fiesta local.
Vuelve a complicarse con el descenso el West Ham, que se queda empatado con el Bournemouth a 23 puntos. Impulso para el Leicester, que mantiene su renta con el Chelsea y sigue a la estela del City.