Duelo de alternativas, de equipos que quieren llegar a ser. Y como tal, empate a poco. O a mucho. A mucho juego, entretenimiento y nombres que apuntar. Alli, Barkley, Carroll... Muchos jóvenes, titulares y protagonistas en el partido.
Pero el Everton dio primero. Curiosamente, con un gol de un jugador cedido por el Tottenham. El Everton quiso, pero no pudo. Guardó respeto porque sabía quién había enfrente y se quedó a medias hasta el final del partido, cuando intentó correr y golpear a través de un desatado Lukaku.
El Tottenham, por su parte, buscó el dominio del partido gracias a sus centrocampistas. Carroll, Dier, Eriksen, Lamela y Alli. Todos ellos para llevar el timón. Hasta que el último puso un golazo. Crece en la élite y en la Premier ya lo conoce todo el mundo.
El 1-1 ponía justicia... y asi prosiguió el partido hasta el final. El Tottenham sigue cuarto aunque pierde un poco de fuelle respecto al liderato y el Everton se queda undécimo, tierra de nadie.