Independiente caía por 0-1 en casa frente a Arsenal de Sarandí. El 'Rojo' merecía más y, con un golazo de falta directa, se encontró con el empate gracias a un excelso golpeo de Leandro Fernández.
Pero el futbolista pasó de héroe a casi villano en unos segundos. En su celebración, el jugador optó por quitarse la camiseta con el objetivo de festejar su logro. Olvidó por completo que tenía amarilla.
El colegiado, al verlo, le mostró la segunda cartulina y Leandro Fernández acabó expulsado. La cara de su entrenador cambió en cuestión de segundos.
18 de febrero de 2020