En las manos de Oblak, en las botas de Messi

El portero menos goleado del campeonato (11 goles) frente al máximo goleador con 23 tantos, representan el duelo individual más crucial de cuantos acontecerán el domingo entre el Barcelona y el Atlético de Madrid, primero y segundo de LaLiga Santander respectivamente, con cinco puntos de diferencia entre ambos.

Oblak acumula esta temporada 21 partidos sin encajar gol de los 33 que ha disputado este curso. Durante este año 2018 solo dos equipos han perforado su portería en diez partidos: el Girona (1-1 en el Wanda Metropolitano) y el Sevilla (2-5 en el Sánchez Pizjuán).

No obstante, en los diez duelos del esloveno contra el Barcelona solo ha conseguido llevarse algo positivo en tres: una victoria (en la vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones 2015-16, triunfo 2-0 en el Vicente Calderón y pase del Atlético) y dos empates (ambos 1-1, el de la primera vuelta liguera de este curso en el Wanda Metropolitano, y en la quinta jornada de la campaña anterior). El resto, siete derrotas.

Por su parte, Messi llega a este duelo crucial con cuatro tantos en los últimos tres partidos (uno a la UD Las Palmas, dos al Girona y otro al Chelsea inglés), y recibe a un Atlético que es una de sus víctimas favoritas, al que ha anotado 27 goles en 35 partidos oficiales, una media de 0,77 tantos por encuentro.

La voracidad del punta argentino con el Atlético, al que ha castigado con tres tripletas goleadoras (dos en Liga en 2011, para las victorias 3-0 y 5-0 de su equipo; y uno en octavos de Copa en 2009 para un 1-3 en el Vicente Calderón) y otros tres dobletes (en Liga en 2007, 2009 y 2012) se ha difuminado levemente en los últimos años, especialmente en los diez partidos en los que se ha enfrentado con Oblak.

En esos diez encuentros (seis de LaLiga, dos de la Liga de Campeones y dos de la Copa del Rey), Messi ha visto puerta en cinco, mientras que en otros cinco se ha quedado sin marcar, de ellos cuatro de los últimos cinco precedentes, si bien es cierto que en al menos cuatro de ellos el Barcelona ha sacado algo positivo.

Los últimos cinco enfrentamientos entre azulgranas y rojiblancos con Oblak y Messi en el campo ofrecen solo un gol del argentino: el último fue un 1-1 en el Wanda Metropolitano (Saúl y Luis Suárez), 1-2 para el Barça en el Calderón (Godín; Rafinha y Messi); 1-1 en el Camp Nou (Rakitic y Correa); 2-0 en el Calderón en Liga de Campeones (Griezmann por partida doble) y 2-1 en el Camp Nou en Champions (dos de Luis Suárez frente al tanto de Fernando Torres).

Completan los precedentes cinco encuentros anteriores con cuatro goles de Messi: un 2-1 en el Camp Nou (Messi y Suárez; Koke), un 1-2 en el Calderón (Torres; Neymar y Messi); otro 0-1 en el Manzanares (Messi), 2-3 de Copa en el mismo escenario (Torres Raúl García; dos de Neymar y Miranda en propia puerta) y 1-0 en el Camp Nou (Messi).

Frenar al astro argentino será una de las claves si el Atlético quiere arrancar una victoria del Camp Nou, donde no ha ganado nunca en Liga durante la etapa del argentino Diego Pablo Simeone al frente del equipo.

Messi asegura durante esta temporada un gol cada 99 minutos en Liga (ha marcado 23 en 2.282 minutos disputados, y es el segundo jugador que más ha estado sobre el césped tras el portero alemán Ter Stegen, que lleva 2.340); Oblak recibe un tanto cada 212 minutos esta campaña en el campeonato doméstico (11 goles recibidos en 2.340 minutos sobre el césped).

De la habilidad de uno y otro, el acierto de otros goleadores azulgranas como el uruguayo Luis Suárez (20 goles en Liga) o la llegada del brasileño Paulinho (8) y la capacidad de controlar la ofensiva local del Atlético, se dirimirá si hay Liga o el Barcelona vuelve a poner distancia con hoy su máximo rival para el campeonato.