No es que haya 'Messidependencia', es que cualquier equipo del mundo se movería al son del argentino en sus días buenos y lo echaría de menos en circunstancias negativas. Su día malo se pudo evidenciar en la gran cantidad de balones que perdió: ¡hasta 28!
Su escalofriante dato, así como las 16 pérdidas de Sergio Busquets en la línea de creación, dan clara idea de cómo fue el naufragio azulgrana en Butarque.
Que ambos fueran los que más balones perdieron supone que no hubo claridad en los últimos metros ni una salida limpia del esférico.
Igualmente, Coutinho llegó a la cota de 16, aunque la mayoría de ellos los hizo en el área rival o en sus inmediaciones, intentando buscar desequilibrios.
Sergi Roberto también se mostró muy errático: perdió una docena de balones a lo largo de los 90 minutos.