"La infección me carcomía la carne; tenía agujeros por toda la pierna"

Todo aficionado al fútbol en la segunda década del siglo XXI es consciente de la importancia que tuvo Ribéry para el Bayern de Múnich. La dupla formada junto a Arjen Robben volvió a más de uno loco, sin saber cómo parar a cualquiera de ambos. Leyenda del cuadro bávaro, cree que le quitaron un Balón de Oro y habló de unos problemas que casi le hicieron amputarse una pierna.
Es esto último lo más grave que le ha pasado. Todo comenzó en 2023, en el ocaso de su carrera. "Mi rodilla me dolía cada vez más. Ya no entrenaba entre partidos, sino que me recuperaba para preservarme. Perdí el ritmo para salvarme. Luego, los exámenes revelaron que no me quedaba cartílago. Me operaron en Austria, me colocaron una placa en el interior", dijo a 'L'Équipe'.
"Casi cinco meses después, tuve una infección grave. Durante dos meses tomé pastillas. La placa fue removida. La infección me había carcomido. Fue tan grave que tenía agujeros en toda la pierna. Había cogido el Staphylococcus aureus. Estuve ingresado en un hospital en Austria durante 12 días. Estaba realmente asustado, estuvieron cerca de cortarme la pierna", aseguró.
Otro de los temas de los que habló fue del Balón de Oro de 2013, del cual él se considera ganador: "Lo tuve todo menos eso ese año. Fue el año perfecto, no pude hacerlo mejor. Ese Balón de Oro seguirá siendo para siempre una injusticia. Aún estoy buscando la explicación, aunque algunas personas me han dado una. Nunca entenderé por qué el cierre de las elecciones se retrasó más de 2 semanas, cuando yo estaba en cabeza entre los periodistas. Si la votación hubiese sido la misma que ahora, habría ganado. Con toda humildad, en 2013 no tenía nada que envidiarles a Cristiano y a Messi".
Ribéry se ha sentido más querido en Alemania, pero no reniega de su Francia natal: "Hubo algunas situaciones difíciles, hice algunas cosas estúpida, lo sé. ¿Pero quién no? También ha habido injusticias. Las críticas que recibí fueron en su mayoría de personas que no conocen el fútbol desde dentro. He pasado por grandes tormentas, pero siempre he permanecido de pie. Lo di todo por la camiseta azul en 2006, también para clasificarnos para el Mundial de Brasil. Por eso algunas cosas fueron difíciles de vivir".
"Siempre es un placer estar con Zizou. Siempre hemos tenido una buena relación. Sigue siendo como un hermano mayor. Aún hoy sigue siendo un modelo por su sencillez, su discreción y su respeto. Es un referente en mi desarrollo como entrenador. Zizou es la mejor persona que le podría pasar a 'Les Bleus", sentenció.