Luis Suárez Miramontes ha fallecido tras unos últimos años de retiro en Milán. El ex jugador del Barcelona y el Inter, entre otros, comenzó su carrera en el Deportivo de La Coruña, el equipo de su tierra, que le vio triunfar. Se trata del único jugador nacido en España que ha ganado el Balón de Oro en toda la historia. Es por eso que quizás haya emergido en el subconsciente del aficionado la siguiente pregunta: ¿quiénes se quedaron más cerca de emularle?
Antes de abordar la lista, conviene mencionar que Alfredo di Stéfano sumó el trofeo a sus vitrinas antes de la gesta de Suárez, pero, aunque tuviera la nacionalidad española, nació en Buenos Aires, de modo que hay que computar sus éxitos al fútbol argentino. La 'Saeta rubia', de todos modos, dejó un recuerdo imborrable en el país ibérico por su legendario paso por el Real Madrid. También impactó en Colombia de la mano de Millonarios.
El caso es que quedó en 2º lugar en el Balón de Oro de 1956, el 1º de todos, que recayó en el poder de Stanley Matthews en representación del Blackpool FC. En las ediciones de 1957 y 1959, el mito 'merengue' sí que recogió la distinción y posó para las fotos tan solo 1 año antes de que 'Luisito', como se le apodaba cariñosamente en sus diversos destinos, le emulara y amagara con repetir su triunfo en 1961, 1964 y 1965, cuando saboreó el podio.
Amancio, de Galicia al mundo
El primer jugador español en acercarse a las gestas de Luis Suárez fue su paisano Amancio Amaro, el 'Brujo', que quedó en la 3ª plaza de la gala del Balón de Oro de 1964, la penúltima del 'Arquitecto', como le llamaba Alfredo di Stéfano, antes de desaparecer de las listas aúlicas del balompié. De haberse alzado el ex del Real Madrid con el trofeo, habría sentado un precedente inaudito: el mundo habría visto a 2 Balones de Oro de La Coruña.
Los 2 dieron sus primeras patadas a la pelota en Galicia, que, este año, también está de enhorabuena por el Centenario del Celta de Vigo. Son tiempos interesantes para el norte de España, que dominó la exportación de talento a otros rincones de la geografía nacional en aquellos años de deporte en blanco y negro. Ahora, sus principales equipos, el ya mencionado Celta y el Dépor, pugnan por la permanencia y por volver a la élite, respectivamente.
Amancio y Suárez no coincidieron en sus etapas en el cuadro 'herculino', pero sí posteriormente. Llegaron a disputar juntos un partido de veteranos contra mitos del Real Madrid y el Atlético. Les endosaron un 5-1 aparejado al brillo de sus carreras y regalaron una imagen que hará que cualquier aficionado de Riazor sienta un cosquilleo en el estómago. ¿A dónde podría haber llegado el club de haberles disfrutado a la vez?
Sequía, el 'Buitre'
Tras los éxitos de los coruñeses, llegaron los de los madrileños. Emilio Butragueño, el 'Buitre', puso fin a una sequía de más de 20 años sin jugadores españoles en el podio del Balón de Oro llevándose el bronce en 1986 y 1987. Se quedó con las ganas de emular a Suárez, pero reabrió una vía que llevaba mucho tiempo sin explorar y que sentaría las bases para que, a principios de siglo, otro madrileño se colara entre los mejores del mundo.
En la actualidad, la leyenda del Madrid trabaja como director de relaciones institucionales en el club presidido por Florentino Pérez, así que es un rostro habitual en los medios de comunicación. Suele comparecer en entrevistas en los descansos de los partidos importantes o después de los mismos para concentrar las preguntas de la prensa mientras los jugadores se ocupan de celebrar o lamentar. También ha estado en presentaciones como las de Fran García o Brahim Díaz. Es su escudo.
En la década de los 80, si no se vistió de oro, fue por tener que competir con otros futbolistas ya retirados que suelen ocupar titulares en el presente. Tanto Gary Lineker, el Balón de Plata de 1986, como Paulo Futre, el de 1987, ofrecen una gran facilidad para dar declaraciones llamativas. Se recuerda un poco menos en España a quienes ganaron aquellos trofeos, Igor Belánov (1986) y Ruud Gullit (1987).
Raúl, delantero absoluto
Raúl González estrenó el presente siglo con presencia española en el podio del Balón de Oro de 2001, en el que compartió escenario con Michael Owen, el ganador, y Oliver Kahn, que quedó en tercer lugar. En aquel entonces, el punta del Real Madrid contaba tan solo 23 años y había anotado 32 goles en 50 partidos. Emanó esa figura de delantero centro tan necesaria en cualquier época del deporte rey.
Para los amantes de las estadísticas y de que estas sean fieles a los resultados, su Balón de Plata es una delicia. La logró en la mejor temporada, a nivel de números, de su carrera. Aunque, más adelante, forjara su leyenda en Concha Espina, no hubo otro curso en el que batiera más veces al portero rival. Ni siquiera en sus años en Alemania de la mano del Schalke 04 o cuando protagonizó etapas en el Al Sadd o en el New York Cosmos. Ahora, dirige al Castilla.
El eterno '7' no solo dio continuidad al trabajo de Emilio Butragueño, sino que dibujó otra dupla de futbolistas nacidos en la misma ciudad que se habían hecho hueco entre los más destacados del globo. Madrid recogió el relevo de La Coruña. El protagonismo geográfico se repartiría más en los siguientes años, en los que Fernando Torres, Xavi Hernández y Andrés Iniesta recogieron los frutos individuales de un fenómeno coral, la Selección Española.
El 'Niño' que mareó a Lahm
Otro delantero centro, Fernando Torres, devolvió a España al podio del Balón de Oro en 2008, el año de inicio del ciclo legendario de 'la Roja' que se alzó con la Eurocopa, el Mundial y la Euro de nuevo consecutivamente. El 'Niño' marcó el gol de la final contra Alemania en la primera de estas conquistas dejando atrás a un Philipp Lahm que no se entendió con su portero y le regaló la oportunidad de, merced a una 'picadita', hacer sonreír a todo un país.
"Si él hubiera dado un paso a la derecha, el balón hubiera sido del portero. O no se entiende bien con Lehmann o se confía y es una décima de segundo que me da para poder pasar por el otro lado", explicó, en una reconstrucción de las mejores jugadas de aquella gesta, el ahora entrenador de las categorías inferiores del Atlético de Madrid. Ya no es el 'Niño', sino un referente para el niño. Formará a los llamados a emular sus triunfos en la élite.
Con Torres, empezó la época en la que, a pesar de contar con una constante presencia en las listas del Balón de Oro, España siempre se quedó a la zaga de la batalla entre Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Estuvo vigente desde 2008 hasta 2017, es decir, por casi una década, hasta que Luka Modric rompió la rutina en una demostración de que la veteranía puede ser la mejor arma para mantenerse notorio y exitoso en las grandes ligas.
Xavi e Iniesta, tiranos del 'tiki-taka'
El periodo de bonanza de la Selección Española coincidió con los mejores momentos de la historia del Barcelona. Con Pep Guardiola a los mandos, el equipo encontró la vía suprema para batir a todos los rivales que se les pusieran por delante en las campañas más tiranas que se recuerdan en la Ciudad Condal. Para llevar a cabo semejante epopeya, hizo falta contar con 2 centrocampistas de época, Xavi Hernández y Andrés Iniesta.
El actual entrenador azulgrana, heredero de los preceptos que aprendió y de los que se siente orgulloso porque formaron su estilo de juego y su personalidad, es el que más compareció en el podio del Balón de Oro, con 3 Balones de Bronce, los de 2009, 2010 y 2011. Su compañero celebró la plata en 2010 y el bronce en 2012. En todas estas ediciones, en cierto sentido, se dispararon en el pie, pues fueron de los principales motivos por los que Leo Messi acogió el oro. Son los mayores socios que ha tenido en toda su trayectoria.
Su impacto fue tal que son los únicos en armar un podio con doble presencia española desde 1964, aquella edición en la que Luis Suárez y Amancio pusieron La Coruña en el mapa. Las gestas de Iniesta y Xavi, eso sí, fueron más globales que las de ningún otro 'crack' nacional por cómo tomaron la batuta de 'la Roja' en el 'Triplete' 2008-2010-2012. No existe aficionado al que no se le erice la piel recordando la volea de Johannesburgo. "Cesc para Iniesta. No hay fuera de juego".