Y es que al que fuera jugador del Barcelona y Arsenal se le ha negado el visado y no ha podido entrar en Estados Unidos, país donde su club inicia la gira de pretemporada.
Todo ello es debido, según informan varios medios británicos, a los problemas del futbolista chileno en España, ya que fue acusado de defraudar 983.000 euros derivados de sus derechos de imagen en 2012 y 2013.
Este hecho supone un gran contratiempo tanto para el Manchester United como para el propio Alexis Sánchez, aunque los abogados del jugador ya están trabajando a fondo para intentar lograr un permiso para poder entrar en Estados Unidos.
Mientras lo consigue, el resto del United ya se encuentra en el país norteamericano. Allí se medirán este viernes al América de México.