El PSG está obligado a ganarlo todo en Francia y, al menos, a salvar el honor en la Champions League. La Ligue 1 suele ser cosa de los de Tuchel, pero el pasado curso fracasaron tanto en la Coupe de France como en la Copa de la Liga.
Parece que de estos errores ha aprendido el cuadro francés, que dejó resuelta la eliminatoria de octavos de final ante el Le Mans en la primera mitad.
Sarabia abrió el marcador en el minuto 21. Su remate, desde dentro del área, lo llegó a tocar el meta local, pero no logró impedir que el español pusiera el 0-1.
El tanto tranquilizó a un PSG que hasta la recta final del primer periodo vivió de la renta. Pero la calidad no necesitó más de dos minutos para dejarlo todo resuelto, tal y como demostró Kylian Mbappé.
El delantero aprovechó un saque de falta de 'pillo' del PSG en el 40'. El colegiado señaló falta en la frontal, con Di Maria en el suelo, y un compañero picó el esférico de repente hacia Mbappé. Este cedió la bola a Choupo-Moting para que pusiera el segundo en el marcador. Apenas dos minutos después, el propio '7' se encargó de aumentar la ventaja en un mano a mano tras una gran asistencia de Verratti.
Tras el descanso, Di Maria solo tardó dos minutos en hacer crecer el colchón de los visitantes. Desde fuera del área, y con la ayuda del portero, el argentino firmó el 0-4.
El Le Mans reaccionó, seguramente con la convicción de que ya no tenían nada que perder, y Sergio Rico empezó a tener trabajo. En una de las llegadas, Manzala, que entró en el primer tiempo desde el banquillo, hizo el tanto del honor para los locales.
El resto del partido tuvo una menor intensidad. El arreón del Le Mans se diluyó y ambos parecían ver bien el resultado. Entre faltas y alguna que otra riña, el encuentro llegó a su final. El PSG ya está en cuartos de final de la Copa de la Liga.