Una llamada a un periódico local alertó a las autoridades, que se movilizaron para evacuar a las personas presentes en el edificio y en los aledaños.
El ambiente de violencia que se vive en la capital, Atenas, obligó a suspender el pasado fin de semana el derbi local, entre Panathinaikos y Olympiakos, por los graves disturbios registrados dentro y fuera del estadio antes del encuentro.