Italia es el país más afectado por el coronavirus y el fútbol transalpino está en el punto de mira desde hace varias semanas.
Con las competiciones paradas, los organismos responsables de las mismas vislumbraban la posibilidad de que el balompié pudiera regresar en mayo o junio.
Sin embargo, el panorama en el país no parece mejorar al ritmo esperado y el pesimismo respecto al regreso del fútbol es cada vez más evidente.
Así lo demostró Damiano Tommasi, presidente de la Asociación Italiana de Futbolistas, que dejó caer una posible suspensión total de las competiciones.
"Tras las palabras del ministro Spadafora la preocupación de que se cierren los campeonatos existe. Hay que analizar el problema del cierre de la temporada desde un punto de vista deportivo, de los contratos...", explicó en 'ANSA' el ex jugador, que ve el futuro cada vez más negro.