La historia de Nathan Soares es una de las más rocambolescas de la historia reciente del AC Milan. Justo en unos días en los que Milán ya da la bienvenida al brasileño Paquetá, su compatriota sale por la puerta de atrás después de pasar de estrella a estrellado, y con estrépito.
La gran duda es con qué intención fichó el club ‘rossonero’ a Soares. Por aquel entonces, Massimiliano Mirabelli vio en él un delantero con tremendo potencial, a pesar de que llevaba unos 18 meses sin equipo tras dejar Cruzeiro.
La primera polémica no podía llegar antes. El futbolista anunció por sí mismo el fichaje antes de cerrarlo. El club, obviamente, salió al paso y desmintió el acuerdo. Sin embargo, poco más tarde, se hizo oficial: Nathan Soares fichaba por el Milan Primavera.
Aunque llegó a participar en los entrenamientos de Gennaro Gattuso, su aporte con los de Lupi fue testimonial: jugó 34 minutos en la final de la Coppa Italia Primavera ante el Torino, con derrota ‘rossonera’. Desde entonces no volvió a vestirse de corto. Y es que muchos ya veían que el fichaje de un joven que llevaba año y medio en el paro, no tenía buena pinta.