Finales de octubre y principios de noviembre es una etapa muy atractiva para el aficionado de Fluminense. Su equipo volverá a visitar el campo de Bahía, un histórico de su fútbol que está de vuelta en Primera División tras ascender desde la 3ª plaza de Segunda la temporada pasada y, en cierto sentido, este duelo será la preparación ideal de cara a la final de la Copa Libertadores contra Boca Juniors la semana que viene. La clave está en la hemeroteca.
El Esporte Clube es justamente el primer club brasileño que participó en este campeonato, así que Marcelo y compañía visitarán al representante nacional que dio inicio a la legendaria trayectoria de las entidades 'cariocas' en un torneo de tal enjundia y, posteriormente, pelearán por añadir otro entorchado a las vitrinas de su país. El componente poético es llamativo y el deportivo, también: la victoria se presenta necesaria para no perfer fuelle con los puestos de más arriba. Athletico Paranaense está a 4 puntos en la 7ª posición.
Si se analiza tan solo el plano futbolístico y se aparca lo sentimental, eso sí, el tricolor se presenta como clarísimo favorito ante un contrincante que pugna por no volver a la B. En la actualidad, ocupa el 15º lugar de la clasificación con un colchón de tan solo 2 unidades sobre Goiás, que marca el inicio de los asientos teñidos de rojo. Quedan 8 jornadas para el cierre de la campaña y la situación es bastante extrema.
Volviendo al dato que da sentido a esta noticia, Bahía se clasificó para la Libertadores de 1960, la 1ª que se llevó a cabo, porque ganó la Taça de 1959. Por aquel entonces, esta era la competición referencia en Brasil ante la inexistencia de una Liga como la actual, popularizada como Brasileirao. Esto no quiere decir que haya dejado de jugarse la Copa, que, en septiembre, ganó Sao Paulo frente a Flamengo. Goza de bastante más arraigo en la afición europea, eso sí, la Copinha, habitual caladero de talento joven que acaba en las grandes ligas.
En aquella edición de estreno para el Esporte Clube, en todo caso, se utilizó un formato de cuartos de final, semifinales y final, sin fases de grupos, con únicamente 7 participantes -el conjunto paraguayo pasaba directamente a 'semis'-. Los compatriotas de Fluminense cayeron en la 1ª ronda ante San Lorenzo, de Argentina, por 3-0 en la ida y a pesar de ganar por 3-2 en la vuelta. Peñarol acabaría eliminando a los de la nación de la 'Albiceleste' antes de imponerse a Olimpia en el partido por el título.
Marcelo y la entidad que le dio la bienvenida después de su larga estancia en el Real Madrid y un tímido periplo en el Olympiacos no alcanzan la final desde 2008, cuando la perdieron ante Liga de Quito. Tras 15 años peleando por volver a ser una referencia en su Liga con el poderío de Palmeiras o Flamengo haciendo sombra, esta oportunidad se presenta clave para demostrar que el tricolor puede dar el relevo al negrirrojo y al verde.