Fornals ilusiona, Fabianski regala, Alisson salva y el Liverpool gana

No hay quien pueda con este Liverpool, que hasta a los porteros contrarios los tiene de su lado. No permite fallo el equipo de Klopp, y Fabianski tuvo uno, y muy grave, en forma de balón que se le escapa entre las piernas. Al rato, Alisson, hacía el milagro de todas las noches.

El Liverpool completó una actuación irregular pero le bastó para ganar a un West Ham que evidenció que ni sin Pellegrini termina de corregir sus problemas defensivos. En Anfield, cualquier despiste se paga en forma de derrota. Y eso que Fornals hizo soñar al equipo londinense, hasta que Fabianski se echó mantequilla en las manos.

Marcó muy pronto Wijnaldum, de cabeza tras otro gran centro de Alexander-Arnold. Diop empató casi sin dejar tiempo a Anfield saborear el primer tanto. 12 minutos locos los que se vivieron en territorio 'red'.

El West Ham dio inicio a un ejercicio de solidaridad y defensa tremendo, ante un Liverpool que no lograba conectar ninguna de las ocasiones que se le amontonaban. Sin hilar fútbol brillante, los de Klopp ganan por avasallamiento.

El 'click' en el Liverpool fue un gol rival, de Fornals en el 54', cazando en el corazón del área un servicio desde la derecha. Está acostumbrado el español a las grandes faenas. Pero su diana despertó a la bestia...

El 1-2 dio paso a los mejores minutos del campeón europeo, que se volcó alrededor del área de Fabianski. No tardó en llegar el 2-2 por medio de Salah, cuyo disparo antes agarró el meta del West Ham... pero se le escurrió por debajo del cuerpo.

El Liverpool tocó a rebato y en el 81' Mané le dio la vuelta al marcador anotando a placer otra jugada colectiva de un equipo que tiene dos laterales que ejercen de delanteros cuando el guion lo exige. Demasiado arsenal. Hubo un cuarto gol, también obra de Mané, pero estaba en fuera de juego.

Y aun así, Anfield contuvo la respiración cuando Bowen se plantó solo delante de Alisson y este volvió a firmar el milagro al que acostumbra. Noble, ya en el añadido, se topó con un bosque de piernas en un disparo desde la frontal que fue la última esperanza del empate visitante.

No hubo tiempo para más y el Liverpool, que tiró 25 veces, por siete del West Ham, volvió a sumar una victoria que le coloca nuevamente a 22 puntos por encima del Manchester City.