El partido comenzó con un buen ritmo. Antes de que se pudiesen acomodar los espectadores, Motta ya había adelantado a los suyos. El jugador sacó una falta que, ante la pasividad de atacantes y defensores, se coló en la portería.
Ante este mazazo inicial, del que apenas habían pasado cinco minutos desde el pitido inicial, los locales se repusieron con el paso de los minutos hasta que encontraron la igualada con una preciosa definición de volea de Duque.
Ese tanto sería el definitivo de un choque al que le sobró la segunda mitad, al menos en cuanto al marcador se refiere.