"Estoy muy feliz de tener esta oportunidad y que hayan confiado en mí y, tras concluir la temporada el 30 de junio, decidí no continuar en el Atlético Baleares e intentar ayudar en una temporada tan ilusionante", ha afirmado.
Sin embargo, Fullana ha reconocido que le hubiera gustado poder disfrutar del ascenso con el equipo en el que ha militado las últimas temporadas y del que era su capitán y donde se quedó a tan solo un gol en las eliminatorias ante el Racing de Santander y en la última frente al CD Mirandés.
"La intención era subir con el Atlético Baleares, pero todo fue muy rápido y tras concluir y no lograr ascender se abrió esta posibilidad y fue el momento de decidir", comentó el jugador que es consciente de que no resulta sencillo "ni para entrenadores, ni para jugadores, dar el salto".
Después de una larga experiencia en la categoría de bronce, Françesc Fullana tenía ganas de volver a Segunda División y hacerlo en un campo como el estadio El Toralín del que destacó que "se respira ambiente de fútbol y resulta muy agradable".
La razón de optar por la oferta de la SD Ponferradina, frente a otras posibilidades que se le presentaron, tanto de Segunda División como de Segunda División B, fue la similitud entre su exequipo y el conjunto berciano "muy familiar y cercano con la gente".
Después de haber estado la semana pasada sin ejercitarse con el resto de la plantilla deportivista a las órdenes de Jon Pérez Bolo, Fullana ya trabaja con el resto del equipo y podría debutar, bien en el encuentro amistoso del miércoles ante el UE Ourense o el sábado en la localidad asturiana de Navia ante el Real Oviedo.