Con el Bernabéu intentando digerir aún cómo el 1-0 ant el City acabó convertido en 1-2, Gabriel Jesus, en zona mixta, se refierió a la polémica acción del choque, en la que el Madrid pidió falta sobre Ramos, algo que no vio así el colegiado y permitió al brasileño hacer el 1-1.
"El fútbol es contacto. Yo no le empujé, apenas le puse la mano y por eso no lo anuló. Apenas le puse la manos. La verdad es que no fue falta", dijo en declaraciones a 'Movistar Liga de Campeones'.
Insistió el internacional 'verdeamarelho', que defendió su proceder: "No hice movimientos, estuve parado. No fue falta".
Todo sucedió en el minuto 78, cuando Kevin de Bruyne, pese a estar rodeado por hasta tres jugadores blancos dentro del área, pudo conectar un centro buscando a su compañero en el segundo palo.
Allí saltó Gabriel Jesus. Las imágenes revelaron el contacto de sus manos con Sergio Ramos, que hizo un escorzo raro tras ello. Sin embargo, el árbitro Orsato, así como su asistente en la sala VOR, entendió que no lo suficiente como para señalar la falta que reclamó el madridismo.
Posteriormente, el delantero brasileño estuvo implicado en otro empujón con el sevillano, aunque a la inversa. En esta ocasión, el colegiado italiano sí entendió que el contacto entre el central y el delantero fue lo suficiente para derribarle. Pitó la falta y, al tratarse del último hombre, optó por expulsarle.
Más tarde, en la zona mixta del estadio, el brasileño se reafirmó en su convicción. "El fútbol tiene mucho contacto. El árbitro tiene el VAR y si dio gol es porque sabe que casi no le toqué", añadió.