Pese a que todo el pescado ya estaba vendido y sólo que daban unos pocos segundos para el final del partido, el choque entre Arsenal y Valencia acabó de forma abrupta.
Cerca de uno de los córners, Gabriel Paulista y Maitland-Niles se enzarzaron en una pelea. El jugador 'che' fue el primero en soltar el puño en dirección a la cara del ingles.
El 'gunner' no se defendió, ya que una amarilla le podría costar la final, y aguardó hasta que varios compañeros llegaron y trataron de poner paz. Pese a todo, fue uno de los que acabó viendo la cartulina.
Tras varios empujones entre todos los presentes, el colegiado decidió señalar el final del partido. No sin antes mostrar varias tarjetas amarillas por la bronca que se formó.