El CSKA de Moscú esperaba con paciencia el estreno como goleador de Adolfo Gaich, la apuesta de este mercado del conjunto ruso en cuanto a la zona ofensiva se refiere. Tardó tres partidos, pero al fin llegó.
Con el 0-0 en el marcador en su amistoso ante el Arsenal Tula de la Liga Rusa, Gaich sacó su gen argentino para, en los minutos finales, presionar a la defensa rival en su área.
En uno de esos balones en los que pocos creen robar, el delantero se encontró con un error del guardameta para, con mucha fe, estirar la pierna y cortar el pase al defensor.
Esa intercepción desembocó en un disparo casi sin intención a la portería y en el primer y único gol del CSKA en su triunfo por 1-0. El primero de muchos de un delantero que espera romperla en Europa.