El dirigente blanquiazul reconoció que la situación monetaria del club, pese a ser muy sólida, no permite grandes dispendios. "No tenemos una gran cantidad de dinero para invertir ni ganas de vender a nadie que no venga con la cláusula de rescisión", afirmó en declaraciones a 'Radio Marca'.
García Pont, además, apuntó que el límite salarial de cara a la temporada 2019-20 ascendería entre seis y ocho millones de euros, una subida que tendría el visto bueno de LaLiga. "Esto no significa que debamos gastarlo todo. Las cosas hay que hacerlas con cuidado y con calma", argumentó el directivo.
Por otra parte, el vicepresidente desveló que la previsión de la entidad catalana, de cara a este verano, es que la mitad de las posibles ventas se destinen a refuerzos, el 40% a pagar deuda y el 10% restante, a mejorar la entidad a nivel interno.