Lo que iba a para gran balón de oxígeno para el Extremadura y desasosiego en los rojillos mutó a película absolutamente inesperada. Del 2-0 al 2-3 hubo hasta tres partidos diferentes.
En el primer, un par de impactos de los de Juan Sabas a balón parado configuró una distancia en el marcador que se antojaba casi definitiva para celebrar el triunfo.
Aún en la primera mitad, primero Fausto desvió a gol un lanzamiento de falta de Kike Márquez, mientras luego el 'Pichichi' Enric Gallego tiró de temple desde el punto de los once metros para subir el 2-0 al electrónico.
Osasuna cimentó su remontada en una rápida reacción. Oier, tan solo dos minutos después del 2-0, se movió bien dentro del área para reducir distancias con un cabezazo en una falta botada por Rubén García.
La segunda parte fue encarada de manera diferente por ambos conjuntos. Más temerosos los primeros, más sueltos los segundos. Fruto de ello, llegó el empate en un mal intento de despeje de Íñigo López cuando quedaban 15 minutos por jugarse.
Tres después, Aridane vio la segunda amarilla y a Osasuna le tocó guardar la ropa. El Extremadura empujó en busca del tercero. Y llegó, pero en la otra portería.
Porque en el minuto 94, Roberto Torres, con temple tras asistencia de Rubén García dentro del área, llevó la locura a los jugadores plamplonicas.
Los de Sabas se quedan penúltimos, mientras que la segunda victoria consecutiva iza a los navarros muy cerca de la zona de 'play off' de ascenso.