Tigres ha conseguido su objetivo: ganar a Cruz Azul y certificar su pase a la liguilla. Era un duelo directo, a vida o muerte, en el que los visitantes se impusieron con suprema facilidad a un Cruz Azul negado.
Abrió el marcador Rafael Sóbis, con un buen gol desde la frontal demasiado libre de marca. Controló y disparó cerca de la madera imposible para el portero, cuya estirada fue inútil.
Cruz Azul estrelló contra la madera un penalti que hubiera supuesto la igualada en el marcador. Pocos minutos después, Gignac se inventó un gol de fantasía con una rosca imposible desde el pico del área.
Tras el descanso, mismo guión. Cruz Azul lo intentaba sin mucho éxito y Tigres esperaba para sentenciar a la contra. Y así hizo, de nuevo a través de Gignac con una fabulosa definición en un mano a mano ante el portero.
Tigres cerraba así una victoria que lo lleva a la liguilla por el título. Por su parte, Cruz Azul suma su cuarto año consecutivo fuera de la fase definitiva.