Jonatan Giráldez, entrenador del Barça femenino, declaró, tras ganar la Copa de la Reina ante el Sporting Huelva, que su primera temporada al frente del equipo "no siendo perfecta, es de mucho nivel".
El técnico azulgrana consideró en conferencia de prensa que "en líneas generales la valoración de la temporada es muy buena, no es perfecta porque no se han ganado todos los títulos marcados como objetivos, pero el hecho de conseguir los tres títulos nacionales y ser capaces llegar hasta final de la Champions League tiene mucho mérito. De 47 partidos jugados se han ganado 45".
Giráldez felicitó a sus jugadoras por su "dedicación, esfuerzo en el día a día" y añadió que se queda con la evolución del equipo y sobre todo con la capacidad que tuvieron para rehacerse rápidamente tras perder la final de la Champions ante el Lyon y encarar la semifinal de la Copa ante el Real Madrid, lo que habla "muy bien de su actitud", que ha sido "ejemplar".
El técnico azulgrana, quien dijo que ahora les tocaba disfrutar, dar espacio y después reflexionar y analizar lo que se puede hacer para mejorar incluso el nivel, afirmó que la voluntad es de continuar al frente del equipo y que, aunque "no está todo cerrado", espera que la próxima semana quede todo zanjado.
Explicó que la nigeriana Asisat Oshoala no jugó en la final porque terminó la semifinal con molestias y no quiso arriesgar, y que la neerlandesa Lieke Martens "no ha dicho en ningún momento que se vaya a ir, aunque es cierto que ha habido cierto ruido mediático en torno a su nombre, pero porque es Lieke".
Mapi León, declarada mejor jugadora de la final, también se mostró "muy contenta" por la campaña del Barça. "Obviamente, no es perfecta, pero hemos dado un muy buen nivel y lo seguimos dando, algo muy complicado porque estar siempre ahí arriba es muy difícil, tanto físicamente como mentalmente", dijo.
Reconoció que no esperaba que hubiera tantos seguidores azulgrana en el estadio de Santo Domingo, y resaltó el valor de haber conseguido la Copa de la Reina, sobre todo después de haber perdido la final de la Champions, lo que a su juicio, refuerza el hambre y la ambición del plantel.
Ahora intentará descansar para afrontar a continuación la Eurocopa, una competición "muy difícil" en la que todos los rivales se presentarán con una "intensidad máxima" y en la que tienen mucha ilusión de "hacer un buen papel".
"Valoro la temporada en la línea del equipo. Ha sido un año de cambios, de cosas intensas como la capitanía y el trofeo. Al final esto es un deporte de equipo, me debo al equipo, es mi manera de entender este deporte", expuso Alexia.