El operador de cámara, llamado Mark Hilton, fue el que explicó la curiosa situación que se vivió en el final de fiesta del Manchester City. Seguidor del conjunto inglés, trabajó para cubrir el evento.
Cuando todo había terminado y Hilton se marchaba a casa, aparecieron dos hombres de seguridad del cuadro británico que le preguntaron si podía llevar al técnico, Pep Guardiola, a casa.
"No podrías llevar a Pep a casa, ¿no? No podemos sacarlo", dijeron los guardias. "¿Llevarlo a casa? ¡Lo llevaré a casa!", explicó Hilton, emocionado con poder pasar unos minutos con su técnico, con el que se llegó a sacar una foto.
"En la furgoneta, él podía ver que quería besarle, así que se pegaba a la puerta, pero estuvo muy bien. En todo el camino le decía que nadie iba a poder creer esto", dijo en la propia 'BBC'.
20 de mayo de 2019