La Copa en Alemania dejó este martes una gran sorpresa con la eliminación del Bayer Leverkusen a manos de un equipo de Cuarta División. Por ello, el Borussia Dortmund salió sin contemplaciones al césped en su compromiso copero.
El equipo de Edin Terzic se enfrentó al Paderborn, de Segunda División. Con jugadores importantes en el once, el Borussia puso la directa en los primeros 20 minutos, pero en los instantes finales no supieron gestionar su ventaja.
En el 6', Emre Can abrió la lata para su equipo tras enganchar con la zurda un balón de primeras dentro del área. Solo diez minutos más tarde, en el 16', Jadon Sancho, en un gran contragolpe, se zafó de la defensa rival y definió ante el portero con mucha calidad.
Con una renta de dos goles, el cuadro de Dortmund puso el piloto automático y se limitó a esperar que los minutos pasaran. Algo que casi paga muy caro.
En el 79', Justvan recortó distancias para poner el 2-1 e intimidar a los locales, que no supieron mantener una renta que perdieron 'in extremis'.
En el 95', Haaland puso el 3-1 tras un buen contragolpe, pero el VAR indicó al árbitro que fuese a revisar la jugada. Una vez vista, el colegiado señaló penalti de Passlack. La pena máxima la anotó Owusu y la prórroga se hizo realidad.
Sin embargo, el delantero noruego volvió a demostrar que es uno de los '9' más en forma del mundo. Solo cinco minutos después de iniciarse el tiempo extra, el atacante recibió un balón entre la defensa, se plantó ante el portero y la cruzó para mandar la pelota al fondo de la red.
Así, los de Terzic sellaron su pase a los cuartos de final de la DFB Pokal después de sudar ante un conjunto de Segunda.