Erling Haland no entiende de compasión. El noruego de 19 años realizó la enésima muestra de su valía. Consiguió anotar un doblete que le sirvió para sumar su gol número seis en la Champions League 2019-20 y el número 20 en los 13 encuentros que disputó con el Salzburgo.
Pero esta vez el Salzburgo no pudo aprovecharse de su buena racha goleadora. Los de Jesse Marsch cosecharon la segunda derrota de la fase de grupos en un encuentro en el que casi siempre fueron a remolque.
El Nápoles sí se sirvió del gran momento de unos de sus futbolistas. Gracias al doblete de Dries Mertens -y al posterior tanto de Lorenzo Insigne-, los de Carlo Ancelotti mantuvieron su condición de líder invicto del grupo E.
Los 'azzurri' comenzaron el partido con nervios y los locales estuvieron cerca de adelantarse en el marcador, pero Stankovic lo evitó con una gran intervención al disparo de Enock Mwepu.
Fueron los visitantes quienes golpearon primero por mediación de Mertens, aunque Haland aprovechó un penalti cometido por Kevin Malcuit para establecer el empate al filo del descanso. Antes del de Mertens le anularon uno.
Tras el paso por las duchas, se volvió a repetir el mismo guion de los dos primeros tantos. El delantero belga aventajó a su equipo y el joven noruego de 19 años, de nuevo, consiguó poner las tablas.
Pero el Nápoles se guardó un as bajo la manga, con nombre y apellido: Lorenzo Insigne. Solo un minuto después del 2-2, el ariete italiano aprovechó una asistencia de Mertens -cómo no- para batir al guardameta del Salzburgo Stankovic e instaurar el definitivo 2-3 con una picadita.
Los futbolistas del cuadro austriaco intentaron devolver la igualdad al electrónico, pero los de Ancelotti mantuvieron su firmeza en defensa y lograron llevarse los tres puntos del Red Bull Arena.