Hazard y el Bernabéu, amor a primera filigrana

El ex del Chelsea es la gran atracción del conjunto blanco para esta temporada. Por fin cumplió su deseo de vestir de blanco y, además, de estar a las órdenes de su ídolo Zinedine Zidane. Pero su gran momento se retrasó por el problema muscular en el último entrenamiento antes de la primera jornada de Liga.

Hazard aprovechó el parón de selecciones para ultimar su recuperación y se estrenó ante su público frente al Levante en un Santiago Bernabéu que le recibió con una sonora ovación, tanto durante el calentamiento como cuando saltó al terreno de juego en el minuto 60. Lo hizo ya con el '7' a la espalda, ese número que, gracias a Raymond Kopa, Amancio, Juanito, Emilio Butragueño, Raúl González y Cristiano Ronaldo, tanto significa en el Real Madrid.

El belga actuó con libertad por ambas bandas en el ataque, alternándose con el brasileño Vinicius; aunque la posición en la que mejor rinden ambos es partiendo desde la izquierda. Eden quería demostrar desde el primer momento y no tardó ni 60 segundos en provocar la primera acción de peligro. Precisamente, sirviendo un balón a 'Vini' dentro del área que este estrelló en un defensor.

Su implicación, a pesar de que aún se le ve falto de forma, fue máxima. Tras el fallo del brasileño, presionó para robar el balón y volvió a generar otra ocasión de gol. Dos en un minuto. Hazard aporta ese factor de calidad diferencial en el ataque que necesitaba el Madrid.

Poco tardó el público del Santiago Bernabéu en disfrutar de una de esas jugadas que tanto han visto en Stamford Bridge. El belga salió al contragolpe conduciendo desde el centro del campo y realizó su clásica diagonal hacia adentro, orientándose para pegarle con la pierna derecha y, tras amagar frente a un defensor, buscó abajo el palo largo de Aitor Fernández, pero este respondió con una gran parada y despejó a córner.

Hazard lo volvió a intentar tras el saque de esquina, esta vez buscando el palo corto del guardameta 'granota', pero se encontró con la misma respuesta. No pudo estrenarse con gol, pero el '7' blanco mostró buena sintonía con sus compañeros, siempre buscando la asociación, y dejó un taconazo en el minuto 77 que provocó la admiración del público.

Zidane le dio media hora tras 29 días fuera de los terrenos de juego para tomar ritmo de cara a dos partidos trascendentales, en casa del Paris Saint-Germain y del Sevilla, la próxima semana en los que una buena versión de Hazard será clave para sacar un buen resultado.