Hay pocos jugadores en el mundo que pueden gritar a los cuatro vientos que han jugado en el Madrid. Uno de ellos es José Rodríguez, que se considera afortunado por haberlo conseguido.
En 2012, en el Alcoyano-Madrid de Copa del Rey, el centrocampista debutó con el primer equipo gracias a José Mourinho, con el que tiene un gran vínculo desde ese momento.
Han pasado ya más de ocho años de ese momento y el jugador, ahora en el Maccabi Haifa, afirmó que no lo olvidará jamás. "Me cambió la vida. No sabía qué hacer para celebrarlo. Lo recuerdo como un momento de felicidad plena", dijo en 'AS'.
"No fue el debut soñado porque ni en mis mejores sueños habría imaginado un debut así (con gol). Debutar con el mejor club del mundo es llegar a la cima. Me quedo sin palabras recordando aquel partido", añadió.
Ese encuentro copero hizo mella en él: "Fue, sin ninguna duda, el momento más importante de mi carrera. Sin ese partido no sería quien soy ahora. Estaba abajo, a mí no me conocía nadie, y de repente todo el mundo sabía quién era. Era un chaval con 1.000 seguidores en Twitter y, tras unos minutos con el Madrid, tenía 100.000 'followers' de todas partes del mundo".
Por último, José Rodríguez, que adelantó que le quedan "más de diez años de fútbol", recalcó que su sueño se cumplió. "He jugado con Ramos, Kaká, Modric, Benzema, Cristiano, Morata... Son momentos que voy a recordar toda la vida y que no todo el mundo ha tenido la suerte de vivir. Soy padre y, para mis hijos, Cristiano y Benzema son superhéroes. Yo he jugado con ellos", concluyó.