El propietario de la mitad de las acciones del Extremadura Luis Oliver ha recibido en las últimas horas el alta médica tras permanecer diez días ingresado en Hospital San Francisco de Asís de Madrid por coronavirus.
"Cuando me dijeron que me daban el alta me puse a llorar. Para una familia perder a alguien en esta pandemia es algo terrible. Cuando entré en el hospital había 1.000 muertos, ahora que he salido vamos por 8.000, esto es increíble", señaló.
"Ahora estoy en casa, en una habitación solo, me dejan la comida en la puerta... Así tendré que estar una semana, pero muy contento. Me hicieron el test, pero debían ser los que eran defectuosos porque me dio negativo, pero yo tenía todos los síntomas de un cuadro de coronavirus. El fin de semana en el hospital fue muy duro, no paraba de ir al baño, sientes que se te va la vida", desveló.
"Yo imaginaba a una persona mayor con lo que me estaba pasando a mí esos días, que no lo aguantaba, no duermes, no comes, no puedes hacer nada. El sábado y el domingo creí que me moría, pensaba que no salía. He tenido mil gripes y nada que ver, la agresividad de este bicho es brutal", dijo.
El relato de Oliver fue impactante. "Vas perdiendo capacidad de respiración, recomiendo que al segundo o tercer día ir al hospital. Esta enfermedad tiene componente mental muy cruel: estás solo, nadie tiene ir a ver, a visitar, nadie te puede llorar si te mueres, nadie te puede despedir", comentó.
"Esto me va a ayudar a ser más humano y a relativizar los problemas. Yo sufrí un infarto, pero comparado con esto, un infarto no es nada", comentó Luis Oliver, que agradeció la labor de los sanitarios. "Lo está bordando porque están bajo mínimos", declaró.