Antes del partido entre el Montreal Impact y el New England Revolution, Henry tuvo un gesto muy especial. Quería que todo Estados Unidos recordara ese momento para siempre.
En cuanto comenzó el choque, clavó la rodilla en el suelo. Y, con el puño en alto, permaneció en esa postura los primeros 8 minutos y 46 segundos del partido.
Era su homenaje a George Floyd. El hombre murió a manos de un policía mientras pedía clemencia. Lo hizo durante exactamente esos 8 minutos y 46 segundos.
Una imagen difícil de olvidar. No pudo celebrar Henry una victoria en ese choque, pero ese momento quedará para siempre en las retinas de todos.
July 10, 2020