Aunque el encuentro comenzó animado y con un par de buenas oportunidades para Hércules y Ebro. Primero fue Falcón quien desbarató el mano a mano ante David Mainz. Luego Salva la devolvió evitando el tanto de Chechu en un saque de esquina.
A la media hora de juego, Óscar Díaz se valió de las manos para batir al meta aragonés, aunque el colegiado lo vio bien e invalidó la jugada.
Sin embargo, el partido se fue apagando terriblemente y ya apenas hubo ocasiones que celebrar.
El Hércules acabó con diez los últimos minutos por la doble amarilla que vio Samu.
Ambos se quedan a media tabla, novenos y décimos, respectivamente, viendo cómo cada vez se pone más complicado reengancharse al tren de cabeza.