Y es que a estas alturas de campeonato hay que remontarse mucho, muchísimo para encontrar a alguien con más goles que el argentino. El siguiente máximo goleador histórico con el campeonato tan avanzado había marcado 25 goles... ¡en los años 30! Hace ochenta años, que se dice bien pronto.
El máximo artillero a estas alturas del año fue un compatriota suyo, Antonio Angelillo, artillero del Inter en los años 50. Terminó marcando 33 goles.
El récord del Calcio está en los 35 goles que Gunnar Nordahl marcó en la temporada 1950-51 para el Milan. A este ritmo, Higuaín dejará esa cifra atrás: promediando un gol por partido, podría llegar a los 38 goles.
Puede parecer una cantidad ridícula, pero es que Messi y Cristiano nos han mal acostumbrado. En España, el récord lo ostenta Leo Messi, con 50 goles en 2011-12. Antes de los duelos entre ambos, el récord era del mítico Telmo Zarra, con 38 tantos para el Athletic Club de, precisamente, la temporada 50-51.
Hace no tanto parecía una cifra inalcanzable los 38 que también marcó Hugo Zánchez en 1989-90 para el Real Madrid, y desde 2010-11 se ha batido año tras año, con la excepción de la temporada 2013-14.
Moraleja: no subestimemos al 'Pipita', puede hacer historia, y recordarnos que hacer más de treinta goles en un año es una gesta propia de titanes y al alcance de muy pocos artilleros.