El mapa de los Kluivert: de eventos y discotecas a La Masia

Ajax, Milan, Barcelona, Newcastle, Valencia, PSV y Lille fueron los clubes que disfrutaron del fútbol de Patrick Kluivert hasta 2008, su último año como futbolista profesional. Tras colgar las botas, la saga Kluivert continuaba su legado con una nueva generación. La lupa fue pasando por todos sus hijos. Quincy, Justin y Rubén, de su matrimonio con su exmujer Ángela; Shane, de su relación con Rossana Da Lima.
Quincy Kluivert, a sus 27 años, ha dado ya un paso al lado en el mundo del fútbol. Lateral derecho, creció en las inferiores del Ajax hasta que en 2017, con 20 años, llegó al filial del Vitesse. En 2018 se marchó libre y llegó a debutar en un amistoso con La Nucía de Tercera División. Finalmente, no se hizo hueco en España y en 2021 volvió a Países Bajos, donde jugó de nuevo en ligas menores antes de dedicarse plenamente a la música. Ahora, es DJ Quincy Owen y anima eventos.
Como Quincy, Justin Kluivert también tuvo esa presión de 'el hijo de' desde sus inicios, pero ya desde muy joven se veía que tenía condiciones para poder triunfar en la élite. Con solo 18 años ya le llegó la oportunidad en el primer equipo del Ajax y en su primera temporada completa consiguió hacer 11 goles y 5 asistencias que le valieron un traspaso a la Roma, que pagó algo más de 17 millones de euros por él. Sin embargo, en Italia no terminó de explotar pese a que en la 2019-20 llegó a hacer siete dianas.
Se marchó cedido en la 2020-21 al RB Leipzig, donde solo pudo hacer cuatro goles, antes de pasar a préstamo también por Niza y Valencia. Siete tantos en Francia y ocho en el equipo 'che', donde dejó buen sabor de boca. Precisamente ese rendimiento le sirvió para que el Bournemouth apostase por él en verano de 2023. Tras un buen primer año en la Premier, en este segundo está brillando de la mano de Andoni Iraola con 13 dianas y 8 asistencias. Y solo tiene 25 años.
Dos de los hermanos Kluivert juegan en posiciones de ataque para honrar a su apellido, pero Ruben Kluivert se pasa al otro bando. Central y de 23 años, vive su primera temporada lejos de Países Bajos, donde creció en las inferiores de la mano del Utrecht, que le dio la oportunidad en el primer equipo en la 2021-22. En la pasada 2023-24 jugó en el Dordrecht en la segunda categoría del país antes de que le llegase la oportunidad de un Casa Pia que le ha ofrecido el escenario de la Liga Portuguesa.
El último de la saga Kluivert y, además, el único de otra madre. Shane empezó en su país natal, pero en 2017 llegó a firmar por el PSG, donde estuvo un año. Terminó esa etapa en París en verano de 2017, cuando ya firmó por el Barcelona para incorporarse a La Masia. En este segundo año de juvenil, va a caballo entre el Liga Nacional, su generación natural por edad, y el División de Honor, donde ha disputado menos partidos (12) y donde se le resiste, por ahora, el gol. En el Nacional lleva cinco en 21 partidos.
Shane Kluivert, en 2017
Con sus hijos tratando de hacer carrera, también hay que poner en el mapa al propio Patrick Kluivert. Tras pasar por el cuerpo técnico del AZ Alkmaar, añadió más experiencia como asistente del NEC Nimegen en 2010 antes de ponerse a los mandos del Twente juvenil en la 2011-12. En agosto de 2012, formó parte del cuerpo técnico de Países Bajos con Van Gaal hasta el Mundial 2014. En 2015, su primera vez como primer entrenador fue a los mandos de la Selección de Curazao.
Luego, pasó por Camerún como asistente -con Seedorf- y fue director del fútbol formativo en el Barça hasta 2021. En 2023, da el salto a la Liga Turca de la mano del Adana Demirspor, pero solo duró tres meses en el cargo al ser destituido por una mala racha de resultados. En enero de 2025, le llegó la oportunidad de ser seleccionador de Indonesia, donde está desde entonces.