El Alberto J. Armando, el mítico estadio de Boca Juniors conocido popularmente como La Bombonera, festeja este lunes 80 años "latiendo" gracias al aliento y el apoyo de los hinchas 'xeneizes', que vieron pasar sobre ese césped a una innumerable cantidad de glorias en un sinfín de partidos históricos.
Futbolistas, entrenadores, periodistas e hinchas que estuvieron en el estadio comprobaron que si los aficionados saltan al mismo tiempo, el estadio vibra.
"Es el único que se mueve. Ustedes pueden creer que es mentira, pero te quedás quieto y la cancha se mueve. No es normal, no pasa en ningún lugar, yo tuve la suerte de jugar en todos los estadios. Es el único estadio que se mueve", dijo, el año pasado, el ídolo máximo del club: Juan Román Riquelme. Orgullosos, los hinchas se golpean el pecho y repiten hace años una y otra vez su frase de cabecera: "La Bombonera no tiembla, late".
Desde su fundación el 3 de abril de 1905, Boca Juniors peregrinó por varios campos, casi todos en el barrio de La Boca, hasta que, el sábado 25 de mayo de 1940, se inauguró el estadio ahora conocido como La Bombonera.
El primer partido fue un amistoso de 70 minutos ante San Lorenzo de Almagro que Boca Juniors ganó por 2-0 con goles del Ricardo Alarcón y Aníbal Tenorio. Antes del partido desfilaron glorias del club. El primer encuentro oficial fue el 12 de junio y el 'Xeneize' se impuso por 2-0 a Newell's Old Boys con goles de Alarcón y Bernardo José Gandulla. Ese año, Boca Juniors ganó todos los partidos que jugó de local y se consagró campeón de la Liga.
La Bombonera... por una caja de bombones
El ingeniero José Antonic, amigo del arquitecto esloveno nacionalizado argentino Viktor Sulcic, que trabajó en el diseño del estadio, dijo en una ocasión a la prensa que una señora le regaló a Sulcic una caja de bombones y que el arquitecto se "asombró al ver que la caja era casi exactamente igual, en su forma, al proyecto del estadio". El mote fue rápidamente adoptado por los hinchas, jugadores, entrenadores y directivos.
Los nuevos directivos del club, que asumieron en diciembre de 2019, pintaron todo el exterior del estadio de azul con una franja amarilla, como la camiseta, (antes era casi toda amarilla con una pequeña franja azul) y quitaron un acrílico cuya finalidad era impedir el ingreso de los hinchas al campo para mejorar la visión de los espectadores.
También se retiró un acrílico de otro sector y se quitaron algunos asientos para que los hinchas se queden de pie y ganar un poco más de espacio.
El estadio, ubicado en el barrio porteño de La Boca, albergó en varias oportunidades partidos de la Selección Argentina y es uno de los más importantes atractivos turísticos de Buenos Aires. En 2014 fue declarado "de interés deportivo, turístico y cultural de la ciudad de Buenos Aires".