La Roma vivió un auténtico infierno en su visita a Noruega. El cuadro italiano llegó al encuentro como líder del Grupo C y con la intención de poner tierra de por medio con sus perseguidores, pero acabó siendo goleado por un modesto Bodo Glimt (6-1).

Se podría decir que los de José Mourinho no lo vieron venir. Parten como uno de los favoritos de la Conference League y llegaron a la tercera jornada con dos victorias a sus espaldas, pero se encontraron con una auténtica pesadilla prácticamente desde el inicio del encuentro.

Este auténtico terror para los romanos tuvo nombre y apellidos: Erik Botheim. El delantero demostró que Haaland no es el único noruego que marca goles, y lo hizo a lo grande, con un doblete que comenzó con un primer tanto en el minuto ocho.

El atacante apareció en todas las facetas ofensivas y fue el encargado de marcar también el tercer gol de la noche. Como si no bastara con eso, fue el asistente en tres dianas.

Así, Botheim conectó con Berg en la jugada del 2-0, a los 20 minutos de partido. La Roma llegó a recortar distancias poco antes de la media hora por medio de Carles Pérez, pero esto solo fue un espejismo.

Porque el show del delantero del Bodo no había hecho más que empezar, ya que tenía lo mejor reservado para la segunda parte. Además de su otro gol en el 52', el atacante asistió a Solbakken y a Pellegrino para engrosar la cuenta en el marcador. El propio Solbakken cerró la goleada con un segundo tanto en su cuenta personal en el 80'.

Poco pudo hacer el equipo de José Mourinho ante el vendaval noruego, solo resignarse ante la evidente superioridad. Así, el partido llegó a su fin y certificó un dato histórico: es la primera derrota del técnico portugués por seis goles.

1.008 encuentros han hecho falta para que el entrenador luso reciba una goleada tan contundente. Y no fue ningún grande de Europa, sino el Bodo Glimt, que se coloca en la cabeza del Grupo C con siete puntos. Habrá ajuste de cuentas en Roma.