Está en buen momento el United. Así lo demuestran los últimos números: desde la victoria al Burnley, el 22 de enero, los de Solskjaer han ganado seis partidos y empatado en tres ocasiones. Las sensaciones son distintas.
Ha mejorado el rendimiento, especialmente, fuera de casa, lejos de un Old Trafford que protege a un equipo falto de identidad en algunos momentos importantes de los partidos. Ante el Derby County, los 'red devils' pusieron encima de la mesa sus galones para hacer cosas grandes.
Y eso que enfrente estaba Wayne Rooney, prácticamente recién llegado al conjunto del Championship y que este jueves se medía a 'su' United, donde forjó su leyenda. Aunque en esta cita, la del reencuentro con viejos conocidos, pasó desapercibido.
No obstante, la leyenda inglesa dejó migajas de su enorme calidad con un zarpazo lejano de falta que tuvo que sacar Romero con una gran estirada. El Derby County rozó el 1-0 antes de que llegara la sentencia del United.
Pasó la media hora de choque y Shaw, con una volea en el costado izquierdo del área, sorprendió a Kelle Roos. Todo se vio con otro color gracias al 0-1 y, especialmente, tras la aparición de Ighalo, que hizo lo que mejor sabe hacer en su gran noche.
El italonigeriano controló un balón complicado en el área y definió al palo corto con clase. Ha llegado a golear, y ya lo hace: suma tres goles en seis partidos con la zamarra mancuniana.
La segunda parte, con un ritmo menor en el juego, contó con otra diana del nuevo cazagoles de Solskjaer. Ighalo se encontró una pelota muerta en el área y fusiló con todo para la tranquilidad de la hinchada 'red devil', que puede dormir tranquila con su equipo en los cuartos de la FA Cup.